Punto comercial estratégico
Uruguay está ubicada en Sudamérica sobre la costa Atlántica y comparte fronteras con Argentina al Oeste y Brasil al Noreste, las dos naciones más grandes de la región. Esta localización les facilita el acceso a grandes centros industriales y de negocios en la zona, así como a los países miembros del Mercosur.
Este país tiene estratégicamente ubicadas a lo largo del Océano Atlántico y de la vía fluvial Paraguay-Paraná, puertos e instalaciones de vías fluviales que facilitan el acceso a puntos económicos vitales tanto de la costa marítima, como tierra adentro.
Otro aspecto atractivo de Uruguay es su alta libertad económica en el movimiento de capitales, divisas y el oro dentro y fuera de la nación, así como un sistema cambiario de libre convertibilidad a la moneda nación. Esto va acompañado por una extensa red de infraestructura que permite el acceso a toda América Latina y al mundo. Su ubicación, infraestructura y condiciones naturales posicionan esta nación como un lugar estratégico para los principales centros comerciales e industriales de la región.
Sólida economía
De acuerdo con la Agencia Uruguay XXI, la agencia responsable de la promoción de las exportaciones, las inversiones e imagen, esta nación lleva varios años destacándose por su buen desempeño macroeconómico, su estabilidad política y sus altos estándares de democracia entre los países de América Latina. Gracias a este positivo entorno Uruguay se ha posicionado en el radar de importantes inversionistas extranjeros como un destino rentable y confiable.
Estos inversores destacan el trato igualitario que les otorga el Gobierno frente a los ciudadanos nacionales, ya que no se les exige permisos o autorizaciones previas para participar en el sector empresarial, permitiendo así que las empresas sean 100% extranjeras. También se benefician de mercados financieros libres, sin restricciones, ni impuestos sobre repatriación de ganancias, capitales, dividendos, ni intereses, ni limitaciones sobre el intercambio de monedas o regulaciones estrictas sobre el mercado cambiario.
Cabe destacar también, que el país se ha convertido en un hub regional por sus acuerdos internacionales vigentes como por ejemplo el MERCOSUR y el TLC con México que le ha permitido acceder a un mercado aproximado de 400 millones de personas, acumulando un 76% del PIB de Latinoamérica y representa un intercambio de comercio exterior del 80% de América Latina.
Aunque pequeña, la economía uruguaya se caracteriza por su respaldo al comercio regional e internacional, donde las exportaciones son vitales para el desarrollo productivo del país. Por ejemplo, el sector de servicios que posee una importante participación en el Producto Interno de País (PIB) y entre los que se destacan el transporte, el comercio, comunicaciones servicios financieros, entre otros.
Finalmente, la Cámara de Industrias del Uruguay destaca que, en el sector primario de su economía, la minería tiene un gran potencial en la producción de basalto, dolomita, piedra caliza, cuarzo, granito y mármol. También es uno de los principales productores de piedras semipreciosas como ágata y amatista. En su sector secundario se destaca el procesamiento de alimentos para animales, bebidas (especialmente vino), textiles, materiales de construcción, productos químicos y la insdustria del papel.
Estabilidad comercial
Gracias al crecimiento sostenido de la economía uruguaya en la última década, acompañado de su amplia libertad económica y un alto grado de transparencia, se les permite a los inversionistas beneficiarse de un marco institucional que establece unas reglas claras para ejecutar negocios y emprendimientos confiables en la región.
Esta confianza que se ha ganado el país en los mercados internacionales también se ha logrado por su estructura de libre comercio, de hecho, el país cuenta con una ubicación privilegiada frente a los países de Latinoamérica, todo esto le ha permitido ganarse en varias ocasiones el reconocimiento de importantes instituciones internacionales como el Índice de Democracia del Economist Intelligence Unit, Índice de Prosperidad de Legatum Institute y Libertad Económica y Monetaria de Heritage Foundation.
Por lo anterior a la nación le han llegado importantes flujos de capital de inversión extranjera directa, lo que profundizo el fortalecimiento del comercio exterior tanto de bienes como servicios. Dentro de las exportaciones los sectores más beneficiados están la producción agroindustrial en carne, soja, lácteos y los servicios logísticos.
Dado el régimen de libertad uruguayo, el Gobierno se ha concentrado en la búsqueda de nuevos mercados ya sea por iniciativa pública o privados, para exportar sus productos al extranjero y diversificar los destinos de sus exportaciones.
Punto neurálgico de entrada a las economías del MERCOSUR
Dentro de las economías de América Latina, la Uruguaya fue la primera en dar el gran salto a un comercio internacional abierto y sin ninguna restricción, fue así como en 1991 firmó un tratado con Argentina, Brasil y Paraguay que dio vida al Mercado Común del Sur, mejor conocido como MERCOSUR, el cual impulsó la economía de Uruguay y le permitió lograr un exitoso proceso de integración.
A través de este convenio se estableció la libre circulación de mercancías, servicios y productos entre los miembros firmantes, quienes establecieron de común acuerdo la erradicación de las barreras arancelarias y no arancelarias. Por ejemplo, el Arancel Externo Común (AEC), clasifica, identifica y establece un valor a todos los productos o mercancías que deben pagar al ingresar al Mercosur, que se determina en un porcentaje que va desde 0% al 20%.
Este acuerdo le permitió a Uruguay alcanzar un gran crecimiento, ya que con la llegada de la Inversión Extranjera Directa (IED), la nación se posicionó entre las más atractivas de América del Sur para los inversionistas extranjeros. Adicionalmente, gracias a su estratégica ubicación geográfica en el centro de la zona de mayor población y nivel de ingreso, las empresas instaladas en esta nación accederán a un mercado de más de 270 millones de personas. También todas las organizaciones que deseen distribuir sus productos a la región se benefician de su importante ubicación, un régimen de libre comercio y una infraestructura efectiva para el almacenamiento de mercancías para su posterior distribución. Además, la red de carreteras del Uruguay es una de las más desarrolladas de América Latina
Zonas francas
De acuerdo con el Ministerio de Economía y Finanzas de Uruguay, su país se ha convertido en un epicentro comercial para creación o relocalización de compañías gracias a sus legislaciones con regímenes fiscales y zonas francas favorables en estos procesos y donde se permite que las sociedades locales sean 100 % de propiedad extranjera y que se puedan formar con un solo accionista.
Es así como la nación uruguaya consolidó un régimen de 11 zonas francas en su territorio nacional, especializada en una gran variedad de áreas como comercios, industrias o servicios, en donde las principales actividades son:
- La comercialización, depósito, almacenamiento, acondicionamiento, selección, ensamble, desarmado, mezcla de bienes o materias primas que provengan del extranjero o de la nación.
- La instalación y operación de maquinaria y equipos de fabricación.
- La utilización de la red de servicios financieros, informáticos, recursos humanos y equipo de reparación y mantenimiento en la ejecución de los procesos de operación.
Estas áreas especiales les permitirán a las personas jurídicas instalarse allí como usuarios y operar sin pagar el tributo nacional, pues están exonerados del tributo de renta, IVA, impuesto al patrimonio, impuesto específico interno e impuesto al control de las sociedades anónimas. Las once zonas francas vigentes en este país son:
- Zona Franca Punta Pereira
- WTC Free Zone
- Zona Franca Colonia Suiza
- Aguada Park
- Zona Franca Nueva Palmira
- Parque de las Ciencias
- Zona Franca Florida
- Zona Franca Libertad
- UPM Fray Bentos
- Zona Franca Colonia
- Zonamérica.
Sistema bancario sólido y ágil
De acuerdo con la agencia Uruguay XXI, encargada de la promoción de inversiones, exportaciones e imagen país, este sector se caracteriza por su solidez, gran capacidad de liquidez y excelentes carteras crediticias de alta calidad. Esto junto a un ambiente legal favorable y atractivo para los principales bancos internacionales, posicionan el sistema bancario de este país como ágil y competente, lo que le ha valido el reconocimiento como uno de los más importantes centros financieros para la realización de negocios en América Latina.
Gracias a que no se presentan limitaciones a la salida o entrada de capitales, ni existe control de cambios sobre operaciones en moneda extranjera, los inversionistas extranjeros se sientes seguros y respaldados para operar en esta nación.
Otro aspecto atractivo de Uruguay es su larga y estable tradición de discreción bancaria. La información protegida por las leyes de privacidad bancaria solo puede revelarse con la autorización de la parte interesada, por resolución de una corte o por petición del Banco Central de Uruguay.
Libertad y estabilidad política
De acuerdo con el Banco Mundial, Uruguay se destaca dentro de América Latina como una sociedad igualitaria que posee un alto ingreso per cápita y unos mínimos niveles de desigualdad y pobreza. Su clase media además de ser la más grande de la región, representa más del 60% de su población.
Según el organismo internacional, Uruguay cuenta con una democracia madura, instituciones fuertes, buena gobernanza y un alto grado de cohesión social, acompañado de un elevado ingreso per cápita e índices relativamente bajos de pobreza, desigualdad e informalidad.
A partir de la implementación de las reformas tras la crisis del 2002 se mejoraron las prácticas de política macroeconómica, se redujo la exposición económica y financiera a los países vecinos y se implementaron nuevas políticas sociales que promovieron la resiliencia de Uruguay. A partir de un marco legal y económico claro, impulsado por el Gobierno, se alcanzó un gran avance de la inclusión internacional, convirtiéndose en uno de los destinos más seguros para la inversión extranjera. El Reporte del Índice de Estabilidad Política, publicado por la Unidad de Inteligencia Económica, el cual evalúa indicadores de dificultad económica y de vulnerabilidad debido a la inestabilidad política, califica a Uruguay como el país número 50 entre los “Menos Vulnerables” en el mundo, y como el menos vulnerable en América del Sur.
Según el Índice de Percepción de la Corrupción del año anterior, Uruguay ocupa el segundo lugar en el continente americano después de Canadá y es el primero entre los países latinoamericanos en términos de transparencia entre 180 países. Los altos niveles de transparencia y bajos niveles de corrupción del país hacen que sea líder entre los países de América Latina, con estándares de similares a los de países desarrollados.
Amplia preparación del talento humano
Con una población cercana a los cuatro millones de habitantes, donde el 92,5% habita en zonas urbanas y un 37% vive en la capital Montevideo. La ciudadanía cuenta con una alta calidad de vida, goza de acceso a los servicios públicos básicos, salud y telecomunicaciones.
La fuerza laboral uruguaya es altamente competitiva debido a una combinación de entrenamiento básico, técnico y universitario de alta calidad y a la flexibilidad con la que los locales se adaptan a nuevas tecnologías y a los dinámicos ambientes de negocios y producción.
Con una tasa de alfabetismo del 98,1%, Uruguay es uno de los dos países con mejor calificación de la región, en donde 1 de cada 3 trabajadores tiene un título técnico o universitario. Según el Reporte de Desarrollo Humano publicado por las Naciones Unidas, Uruguay mantiene un alto nivel de desarrollo humano, calificándolo como el país número 55 a nivel mundial, y el tercero en América Latina, en relación con la calidad de vida en general. En la región, Chile y Argentina son los únicos países que califican con un nivel muy alto, mientras Uruguay lidera el grupo de países de alto nivel.